Entre las provincias de Salamanca y Zamora, haciendo frontera, se encuentra uno de los paisajes más increíbles del interior de España: los Arribes del Duero. Siguiendo el camino marcado por el cañón del río, descubrirá la espectacular belleza de este lugar.
En el interior de España hallará espacios que le parecerán imposibles de creer. El Parque Natural de Los Arribes del Duero es uno de ellos. Está situado al oeste de la región de Castilla y León, en la parte fronteriza de las dos provincias que lo comparten: Salamanca y Zamora. Su paisaje lo domina el espectacular cañón que el río Duero ha formado con el paso del tiempo, el más grande y profundo de la península Ibérica. Una estampa fabulosa de abruptas gargantas y desfiladeros que, en ocasiones, alcanzan los 500 metros de desnivel, y que se extiende a lo largo de casi un centenar de kilómetros por el suroeste de Zamora y el noroeste de Salamanca.
Oasis mediterráneo
Los Arribes del Duero es una zona singular también por otros motivos. Y es que su peculiar relieve y sus condiciones geográficas hacen que posea un microclima especial. Es un lugar de temperaturas suaves, al resguardo del viento, soleado y con una vegetación típica mediterránea. Por eso, no se sorprenda cuando vea en la vertiente del río los cultivos de olivos, almendros, vides o naranjos. Este parque natural, además, es hogar para numerosas especies de animales, algunas en peligro de extinción. Entre su fauna destacan aves como la cigüeña negra, el águila real, el halcón peregrino o el alimoche.
Primavera y otoño, cuando los colores de la naturaleza se tornan más brillantes y luminosos, son buenas épocas para visitar los Arribes. Para llegar a las distintas poblaciones lo mejor es utilizar el coche. No obstante, hallará una red de senderos de pequeño recorrido (PR), articulados alrededor de la ruta de gran recorrido GR-14 a su paso por el territorio del parque, que le permitirán realizar excursiones entre localidad y localidad, y disfrutar de la belleza del entorno haciendo senderismo o en bicicleta. Lo más recomendable es que acuda a las oficinas de turismo donde le informarán de todo lo que necesite.
Recorridos en barco
Tanto en el área de Salamanca como en el de Zamora, los atractivos naturales y culturales de los Arribes son abundantes. En la parte salmantina, por ejemplo, podrá conocer enclaves tan hermosos como el Pozo de los Humos, una cascada de unos 50 metros cerca de la localidad de Pereña, o contemplar vistas impresionantes sobre el río Duero desde varios miradores como el Mirador del Fraile o el Picón de Felipe, ambos a pocos kilómetros del casco urbano de Aldeadávila de la Ribera. En esta población hay otro punto de especial interés: la playa del Rostro, un arenal fluvial ideal para bañarse, practicar piragüismo o dar un paseo en barco de una hora y media de duración por los impresionantes cañones.
Si le apetece seguir navegando, acérquese hasta Vilvestre, donde existen distintas rutas en catamarán y, además, encontrará un importante yacimiento neolítico. Y en la zona de Zamora, entre otras cosas, también podrá divertirse con las actividades náuticas en el embalse de Almendra, admirar el patrimonio monumental de la villa de Fermoselle o descubrir las curiosas “chiviteras” de Torregamones, antiguas construcciones populares que solían utilizar los pastores.
Son sólo algunas de las posibilidades que encierra uno de los parques naturales más singulares de España, Los Arribes del Duero. Elija su itinerario, prepare sus vacaciones y no se preocupe si no consigue verlo todo, puede volver cuando quiera.
(Fuente: Turismo España Spain.info)